“Es una persona con más experiencia, es predecible, es un político de la vieja escuela”, ha dicho Putin en una entrevista orquestada con uno de los periodistas más afines al Kremlin, Pavel Zarubin, durante la que manifestó que prefería que el actual Presidente continúe en la Casa Blanca. En realidad, si halaga a Biden es para proteger las opciones de Trump. Dada la impopularidad que el sátrapa ruso tiene en los EEUU, considera que muchos votantes darán la espalda al candidato que él apoye. Por si fuera poco, en ese momento, él ya sabía que pronto aparecería el cadáver de Aleksei Navalny, el opositor demócrata encerrado en un gulag del ártico por el régimen totalitario ruso, y que eso haría aún más impopular a Putin en Norteamérica. Con la muerte de Navalny no sólo se libraba de su principal crítico interno, le servía también para que su aparente preferencia por Biden refuerce las opciones del gordo parafascista que maniobra para volver a la Presidencia de la primera potencia del planeta. 

Parece mentira que los medios le hagan el juego y se dejen manipular. Sus elogiosas declaraciones sobre el actual líder en Washington le permiten además echar algo de tierra sobre la manipulación que sus servicios secretos, empleando los servicios de Cambridge Analytica, hicieron de las redes sociales, durante las elecciones de hace ocho años, beneficiando las opciones de Trump e impidiendo el triunfo de Hillary Clinton. Ahora aparenta que le gustan los demócratas. No da puntada sin hilo.

Putin entra en la precampaña de las próximas presidenciales de los EEUU, reforzando indirectamente al candidato que, de ganar, debilitará la democracia norteamericana y la cohesión europea. Es lo que quiere, odia la democracia, aunque se dará una pátina de legalidad, el mes que viene, teatralizando unas elecciones presidenciales sin opositores, como las de Maduro en Venezuela y otras muchas.

La democracia está en recesión en el mundo, como indica el gráfico de The Economist que figura al final, a la vez que aumenta con fuerza el gasto militar (un 9 % el año pasado según el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos). Son dos procesos que siempre se complementan. En mi ensayo explico por qué ocurre lo que estamos viendo. Putin es el principal enemigo de que se consolide la convivencia pacífica en un marco de libertad y respeto por los derechos humanos. Hace ahora dos años invadió Ucrania sin provocación previa y burlándose de las leyes internacionales, causando decenas de miles de muertos y desplazados. En la campaña electoral que está iniciando para revalidar su cargo, que ya ocupa por más tiempo que su querido Stalin, venderá esa guerra como una gran victoria en la lucha del pueblo ruso para recuperar los espacios que, según él, le pertenecen.

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3 comentarios

  1. Si. Realmente, la aparente preferencia de Putin por Baiden, frente a Trump, es muy clarificadora. Aunque en sentido inverso, su estrategia predictiva guarda claras similitudes a las de Tezanos en el CIS…

    1. Hay muchos aficionados a manipular, pero comparar a Tezanos con Putin es dar un gran salto de escala

      1. No comparo a las personas, hablo de «estrategias». Solo no se entiende si no se quiere.

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