Trump dejará la Casa Banca en enero, la pandemia de coronavirus registra una segunda ola que golpea con fuerza a Europa y el Brexit llama a la puerta. Un período complicado en el que puede pasar de todo.

El cese de Trump ha sido una victoria de la democracia liberal. Deja una peligrosa división entre una periferia abierta, diversa e industrializada y un centro- sur más cerrado y conservador. La dialéctica que genera esta herencia afectará al propio Partido Republicano, inoculado de la tentación populista, algo parecido parece estar pasándole a nuestro PP (entrada anterior). Como ya habíamos comentado en agosto, el niño gordo rico y mal educado no se irá con facilidad y seguirá trabajando en agrandar esa división que amenaza la paz social de un país lleno de gente armada. Le quedan dos meses de Presidente, tiene mucho poder, sabe que se va y se le puede ocurrir cualquier cosa, además de hacer todo lo posible para revertir en los tribunales el resultado de las urnas.

De nuestro lado del Atlántico, la lucha contra la epidemia centra las preocupaciones. Tendremos semanas de angustia ante la posibilidad de que las medidas tomadas para intentar frenar la segunda ola puedan impactar con dureza en la Navidad y agravar la mala situación económica. Es el momento también de que empiecen a aclararse las vías para combatir el covid-19, deberán concretarse las perspectivas de contar pronto con vacunas.

Deberemos fijarnos también en el impacto de Joe Biden en la política europea. Su ascendencia irlandesa puede complicarle la vida a otro populista, Boris Jonhson, que pretende un tratado de libre comercio con los EEUU para consolidar la posición internacional del Reino Unido tras el Brexit. Biden ha adelantado que no le gustaría que se levantara otra vez una frontera dura entre Eire y Ulster y que el tipo de solución que se acuerde influirá en su actitud para negociar con Londres. Buenas noticias para Europa, pero quedan menos de ocho semanas para el Brexit, un incentivo para que Trump, poco amigo de la Unión Europea, intente cerrar cosas antes de irse.

Más adelante, iremos viendo cómo afecta el cambio a otros populistas más o menos autocráticos (Putin, Erdogan, Netanyahu…). La llegada de Biden ayuda a ser algo más optimistas, inmersos en una situación mundial infectada de tensiones nacionalistas y xenófobas. Tendencias que me llevaron a escribir el ensayo, la base al blog, en defensa de las libertades y de su adaptación a las nuevas condiciones en que discurre la vida de una humanidad numerosa e interconectada.

El libro dedica uno de sus cinco capítulos a la libertad de las mujeres como gran desafío del siglo en que estamos. Desde esa perspectiva, hay que felicitarse de que una de ellas, Kamala Harris, con raíces en la India y en la afroamericana Jamaica, ocupe por primera vez la Vicepresidencia de la primera potencia del mundo.

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